En
Josué 5:12: la Biblia nos dice: “…Y el maná cesó el día siguiente, desde que
comenzaron a comer del fruto de la tierra; y los hijos de Israel nunca más
tuvieron maná, sino que comieron de los frutos de la tierra de Canaán aquel
año….”. Aquí vemos que el maná cesó, Israel había comido 40 años maná
en el desierto. El puré se le da a los bebés: Maná.-
Ellos
aprendieron que Dios les iba a proveer, nuestra vida es un proceso de
conquista.-
¿Por
qué tardaron tanto?. Israel no supo romper su mente de su estructura de
esclavo. Yo no puedo a los 50 años, volver a la discoteca.-
Tengo
que madurar.-
Israel
se olvidó de que fue Dios quien les prosperó.-
Primer
punto para dejar de comer maná: Josué 1:1: “…Aconteció después de la muerte de Moisés
siervo de Jehová, que Jehová habló a Josué hijo de Nun, servidor de Moisés,
diciendo:…”. Lo primero que tenemos que aprender es a escuchar la voz
de Dios.-
¿Por
qué no puedo escuchar la voz del Padre?. Puedo escuchar practicando como Dios
habla a través de su palabra, cuando recibo la voz de Dios eso genera la fe.-
Tenés
que aprender a escuchar la voz de Dios y allí entra la Acción.-
En
Josué 1:3 la Biblia nos dice: “…Yo os he entregado, como lo había dicho a
Moisés, todo lugar que pisare la planta de vuestro pie…”.-
En
Josué 1:5 la Biblia nos dice: “…Nadie te podrá hacer frente en todos los
días de tu vida; como estuve con Moisés, estaré contigo; no te dejaré, ni te
desampararé…”. Dios te va a dar lo que vos esperas. Dios está contento con
tu vida.-
En
Josué 1:8 la Biblia nos dice: “…Nunca se apartará de tu boca este libro de
la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas
conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu
camino, y todo te saldrá bien…”. La meditación de la Palabra de Dios es
muy importante.-
En Salmos 45: 1-5 la Biblia nos dice: “…[Al
músico principal; sobre Lirios. Masquil de los hijos de Coré. Canción de
amores.] Rebosa mi corazón palabra buena; Dirijo al rey mi canto; Mi lengua es
pluma de escribiente muy ligero. Eres el más hermoso de los hijos de los
hombres; La gracia se derramó en tus labios; Por tanto, Dios te ha bendecido
para siempre. Ciñe tu espada sobre el muslo, oh valiente, Con tu gloria y con
tu majestad. En tu gloria sé prosperado; Cabalga sobre palabra de verdad, de
humildad y de justicia, Y tu diestra te enseñará cosas terribles. Tus saetas
agudas, Con que caerán pueblos debajo de ti, Penetrarán en el corazón de los
enemigos del rey…”. Dios quiere que medites en la Palabra de Dios.
La Voluntad de Dios.-
Tengo que discernir la voz de Dios,
Dios les habla a sus hijos. En el Nuevo Testamento Dios le habla a sus hijos.-
En Josué 1:13 la Biblia nos dice: “…Acordaos
de la palabra que Moisés, siervo de Jehová, os mandó diciendo: Jehová vuestro
Dios os ha dado reposo, y os ha dado esta tierra…”. Si a mí me va bien,
tengo que ayudarle a mi hermano que aún no está bien.-
En Josué 3:3-4 la Biblia nos dice: “…y
mandaron al pueblo, diciendo: Cuando veáis el arca del pacto de Jehová vuestro
Dios, y los levitas sacerdotes que la llevan, vosotros saldréis de vuestro
lugar y marcharéis en pos de ella, a fin de que sepáis el camino por donde
habéis de ir; por cuanto vosotros no habéis pasado antes de ahora por este
camino. Pero entre vosotros y ella haya distancia como de dos mil codos; no os
acercaréis a ella…”. Pongan el ojo en el Arca. La Palabra es lo que te
da dirección. Lea sistemáticamente la Biblia. Lee y cabalga sobre la Palabra.-
En Josué 3:5 la Biblia nos dice: “…Y
Josué dijo al pueblo: Santificaos, porque Jehová hará mañana maravillas entre
vosotros….”. Santifícate.-
En Josué 5:13 la Biblia nos dice: “…Estando
Josué cerca de Jericó, alzó sus ojos y vio un varón que estaba delante de él,
el cual tenía una espada desenvainada en su mano. Y Josué, yendo hacia él, le
dijo: ¿Eres de los nuestros, o de nuestros enemigos?...”. Dios se
presenta con la espada para la conquista.-
En Josué 8:1 la Biblia nos dice: “…Jehová
dijo a Josué: No temas ni desmayes; toma contigo toda la gente de guerra, y
levántate y sube a Hai. Mira, yo he entregado en tu mano al rey de Hai, a su
pueblo, a su ciudad y a su tierra….”. Yo te he entregado en tus manos a
la ciudad y el rey, le tenés que cortar la cabeza.-
La Iglesia no tiene lugar para ir hacia
atrás. ¿Cómo tenés que ganar a la gente?: Con oración, las cosas no son
fáciles, la gente es tu herencia. El trabajo, el auto, la casa son añadiduras.-
Enfócate en la gente: forzarlos a
entrar.-
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