En el
Salmo 127: 1 la Palabra de Dios nos dice: “…Si Jehová no edificare la casa, En vano
trabajan los que la edifican; Si Jehová no guardare la ciudad, En vano vela la
guardia…”. ¿Cuál es la familia que va a permanecer hasta el final?. ¿Que
no se va a dejar avasallar por las ideologías de una sociedad aliada con el
mal?.-
La
familia que va a permanecer es la familia que Dios construye. ¿Cuál es esa
familia?: Es la familia que practica la vida espiritual.-
Lo
que Dios bendice es el orden y la obediencia. Muchas veces no alcanzamos porque
no somos ordenados.-
Una
familia que es funcional. Donde la mamá y el papá cumplen sus
responsabilidades, y los hijos. Una familia que vive en amor.-
En Génesis
2:18 vemos que Dios dijo: “…Y dijo Jehová Dios: No es bueno que el
hombre esté solo; le haré ayuda idónea para él….”. Allí Dios estaba
dando una solución a la soledad. Por eso decidió hacerle ayuda idónea a Adán.-
Debemos
orar y clamar al Señor Jesucristo.-
Es la
familia que no se aparta del modelo original dado en Génesis 2:24: “…Por
tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán
una sola carne….”. Es la que Dios construye.-
En
Mateo 19: 4-6 dice: “…El, respondiendo, les dijo: ¿No habéis leído que el que los hizo al
principio, varón y hembra los hizo, y dijo: Por esto el hombre dejará padre y
madre, y se unirá a su mujer, y los dos serán una sola carne?. Así que no son
ya más dos, sino una sola carne; por tanto, lo que Dios juntó, no lo separe el
hombre…”.-
Así también
en Efesios 5 se encuentra el secreto de una familia conforme al Señor: “…Las
casadas estén sujetas a sus propios maridos, como al Señor; porque el marido es
cabeza de la mujer, así como Cristo es cabeza de la iglesia, la cual es su
cuerpo, y él es su Salvador. Así que,
como la iglesia está sujeta a Cristo, así también las casadas lo estén a sus
maridos en todo. Maridos, amad a
vuestras mujeres, así como Cristo amó a la iglesia, y se entregó a sí mismo por
ella, para santificarla, habiéndola purificado en el lavamiento del agua por la
palabra, a fin de presentársela a sí mismo, una iglesia gloriosa, que no
tuviese mancha ni arruga ni cosa semejante, sino que fuese santa y sin mancha. Así
también los maridos deben amar a sus mujeres como a sus mismos cuerpos. El que
ama a su mujer, a sí mismo se ama. Porque nadie aborreció jamás a su propia
carne, sino que la sustenta y la cuida, como también Cristo a la iglesia, porque
somos miembros de su cuerpo, de su carne y de sus huesos. Por esto dejará el
hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y los dos serán una sola
carne. Grande es este misterio; mas yo digo esto respecto de Cristo y de la
iglesia. Por lo demás, cada uno de vosotros ame también a su mujer como a sí
mismo; y la mujer respete a su marido….”.-
Vemos
que en la Palabra de Dios se encuentra el principio de cortar el cordón
umbilical. Una familia no tiene que vivir con sus padres. No importa alquilar.
El Señor te va a proveer para tu casa propia, en su momento. Al cortar el cordón
umbilical es un nivel de vida diferente y correcto.-
El
principio de permanencia: Según Génesis 2:24 que dice: “…Por tanto, dejará el hombre a
su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán una sola carne…”.
Ese matrimonio tienen que permanecer juntos, todos los días tenemos que
morirnos a nuestro yo.-
En Gálatas
2:20 dice: “…Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive
Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de
Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí…”.-
El
principio de la unidad: Serán una sola carne. Tenemos que desechar la palabra
mío para implementar la palabra nuestro.-
El
principio de la intimidad: En Génesis 2.25 dice: “…Y estaban ambos desnudos, Adán
y su mujer, y no se avergonzaban….”. Aquí vemos que Adán y Eva no se
avergonzaban el uno del otro porque no había pecado en ellos.-
¿Cuánto
gana tu esposa?. ¿Cuánto gana el marido?: No hay sinceridad muchas veces. Tiene
que haber unidad. Luchar para que haya transparencia. La familia tiene que
estar unida a Dios. En Juan 15:5 dice: “…Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el
que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí
nada podéis hacer…”. Yo soy la vid, vosotros los pámpanos.-
El esposo, la esposa, los hijos, la familia
que vive unida a Cristo, va a dar mucho fruto. Si Dios no está, la casa se va a
derrumbar, pero sí Cristo está será fuerte esa familia.-
En el
Salmo 119:105 la Palabra de Dios dice: “…Lámpara es a mis pies tu palabra, Y
lumbrera a mi camino…”. Lámpara es a mis pies tu palabra, lumbrera a mi
camino. Lee en la palabra de Dios, medita en la palabra.-
En 1
de Pedro 2:2 dice: “…desead, como niños recién nacidos, la leche espiritual no adulterada,
para que por ella crezcáis para salvación,…”. La palabra del Señor trae
salvación. La palabra de Dios limpia el hogar, debemos poner en práctica la
palabra del Señor.-
En
Amos 3:3 la Biblia dice: “…¿Andarán dos juntos, si no estuvieren de
acuerdo?...”. La familia tiene que tener tiempo juntos, para orar
juntos, tener su altar familiar.-
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