sábado, 16 de febrero de 2019

LA BIBLIA NO TIENE SENTIDO SIN JESUS

          

       Por ejemplo dice que debemos morir para poder vivir, y el propio Jesús hizo eso. ¿Por qué hace eso Jesús?: Con eso rompe los paradigmas.-

         En Hebreos 2:14 leemos: “…Así que, por cuanto los hijos participaron de carne y sangre, él también participó de lo mismo, para destruir por medio de la muerte al que tenía el imperio de la muerte, esto es, al diablo…”.-
         Getsemaní quiere decir prensa, y Dios nos lleva al proceso de Getsemaní, y en ese momento tenemos que decir al Señor hágase tu voluntad.-
    En Hebreos 4:16 la Biblia dice: “…Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro…”. El oportuno socorro siempre es exacto.-
         Jesús el viernes murió, el sábado despojó, y el domingo resucitó.-
         Colosenses 2:15 dice: “…y despojando a los principados y a las potestades, los exhibió públicamente, triunfando sobre ellos en la cruz…”. La muerte tiene poder para triunfar. Debemos tomar la cruz y seguirle a Jesús. Desde la cruz yo tengo el poder para despojar a los enemigos que vienen contra mí.-
         En Mateo 16:21 la palabra de Dios nos dice: “…Desde entonces comenzó Jesús a declarar a sus discípulos que le era necesario ir a Jerusalén y padecer mucho de los ancianos, de los principales sacerdotes y de los escribas; y ser muerto, y resucitar al tercer día….”. Cuando le despojamos al maligno le descubrimos. Muriendo a nosotros mismos.-
         La Biblia se maneja por lo que Dios dice, no por los sentidos. A tus sentimientos le decís en el nombre de Jesús anulo y cancelo, pedís perdón.-
         Que el sol no se ponga sobre tu enojo, con el único que no tenes que arreglarte es con el diablo.-
         ¿Qué tenemos que aprender para nuestra plenitud?: 2 de Corintios 4:10 que dice: “…llevando en el cuerpo siempre por todas partes la muerte de Jesús, para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestros cuerpos….”. Llevar a todos lados la muerte de Jesús. El dijo: Padre perdónalos porque no saben lo que hacen. Los muertos no se enojan.-
         En nuestro cuerpo se quiere manifestar la ira, la enfermedad. ¿Cómo hacemos el proceso en contra de eso?: En 2 de Corintios 3:16 dice: “…Pero cuando se conviertan al Señor, el velo se quitará…”. Cuando se conviertan al Señor Jesús, el velo se les quitará. Esto es para ver la realidad de Dios. Es lo que Dios ve en mí.-
En 2 de Corintios 3:17-18 leemos: “…Porque el Señor es el Espíritu; y donde está el Espíritu del Señor, allí hay libertad.  Por tanto, nosotros todos, mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como por el Espíritu del Señor…”. Cuando ponemos nuestros ojos en Jesús, no pensamos en los problemas.-
¿Qué significa que los enemigos fueron exhibidos públicamente?: Ellos son exhibidos con la nalga al aire. Ellos son los que tienen vergüenza, no nosotros.-
Si vivimos para Dios, vivimos para lo más grande.-
En 2 de Corintios 4:11 dice: “…Porque nosotros que vivimos, siempre estamos entregados a muerte por causa de Jesús, para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestra carne mortal….”. Esto es cuando morimos a nosotros mismos y pedimos perdón a nuestro prójimo y a Dios.-
Como hijos de Dios nosotros ya no vivimos para nuestros propósitos personales. El amor es una decisión. Debemos decidir amarle a nuestro prójimo.-
En 2 de Corintios 4:17 también dice: “…Porque esta leve tribulación momentánea produce en nosotros un cada vez más excelente y eterno peso de gloria;…”. Después de la leve tribulación, produce el peso de la gloria de Dios.-
Mira lo invisible, ¿Qué es?: La promesa de Dios. Somos más que vencedores. Un problema es temporal. Jesús es Eterno.-
En 2 de Corintios 5:14-15 la Biblia dice: “…Porque el amor de Cristo nos constriñe, pensando esto: que si uno murió por todos, luego todos murieron; y por todos murió, para que los que viven, ya no vivan para sí, sino para aquel que murió y resucitó por ellos….”. Uno murió por todos, luego todos murieron, para ya no vivir para nosotros, ya no vivimos para nosotros, vivimos para El.-
Ya no debemos tener celos, impaciencia enemistades, nosotros tenemos el ministerio de la reconciliación. Dios está en paz y reconciliación con nosotros. No debemos tomar en cuenta los pecados de la gente, las ofensas, no te enojes con ellos.-

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