El
agradecimiento a Dios desata el Cielo sobre la Tierra. En Juan 11:41 leemos: “…Entonces
quitaron la piedra de donde había sido puesto el muerto. Y Jesús, alzando los
ojos a lo alto, dijo: Padre, gracias te doy por haberme oído…”. Aquí
vemos que Jesús ni siquiera había empezado la acción y decía al Padre, gracias
te doy por haberme oído.-
En
Hebreos 11:1 la palabra de Dios dice: “…Es, pues, la fe la certeza de lo que se
espera, la convicción de lo que no se ve…”. Cuando usted va a recibir algo, primero tiene
que recibir el Título de Propiedad. Dar gracias antes.-
En Isaías
53:4 dice: “…Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros
dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido…”.
Jesús es el mismo ayer, hoy y siempre. El decía Padre gracias te doy por
haberme oído. Dios no responde a la queja. Dios responde a la acción de
gracias, vemos que Jesús le decía, yo sabía que siempre me oyes, pero lo dije
por la multitud.-
En
Juan 11:44 vemos: “…Y el que había muerto salió, atadas las manos y los pies con vendas,
y el rostro envuelto en un sudario. Jesús les dijo: Desatadle, y dejadle ir…”.
¿Cómo se activó el milagro?: Cuando dio gracias a Dios.-
Señor,
gracias porque este será el mejor día de mi vida. Debemos enseñarles a los
chicos a decir gracias. Se enseña el agradecimiento. Cuando vamos a comer,
paremos todos a darle gracias a Dios.-
En
Mateo 15:36-38 leemos: “…Y tomando los siete panes y los peces, dio gracias, los partió y dio a sus
discípulos, y los discípulos a la multitud. Y comieron todos, y se saciaron; y
recogieron lo que sobró de los pedazos, siete canastas llenas. Y eran los que
habían comido, cuatro mil hombres, sin contar las mujeres y los niños….”. ¿Qué
fue lo que activó el milagro?: las gracias. Eso desata la multiplicación.
Agradecer por cada tic tac de nuestro corazón. Agradecer porque nuestro cuerpo
funciona. El agradecimiento desata la bendición.-
En 1
de Tesalonicenses 5:18 el apóstol Pablo nos enseña: “…Dad gracias en todo, porque
esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús…”. Decir
gracias Señor, viene un problema y ¿Qué le digo?: Gracias Señor porque a este
problema yo le voy a aplastar la cabeza en el Nombre de Jesús. Es una
oportunidad para ver la gloria de Dios. Gracias Señor porque de esta yo salgo.-
En el
Salmo 23: 1-5, el rey David nos dice: “…[Salmo de David.] Jehová es mi pastor;
nada me faltará. En lugares de delicados pastos me hará descansar; Junto a
aguas de reposo me pastoreará. Confortará mi alma; Me guiará por sendas de
justicia por amor de su nombre. Aunque ande en valle de sombra de muerte, No
temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo; Tu vara y tu cayado me infundirán
aliento. Aderezas mesa delante de mí en presencia de mis angustiadores; Unges
mi cabeza con aceite; mi copa está rebosando…”. En medio de tus
problemas dale gracias a Dios por la victoria.-
Israel
vio ver caer a Faraón y cruzaron el mar Rojo, pero cuando llegaron a Mara, allí
se pusieron a llorar, no creyeron que Dios podría tornar el agua salada en agua
dulce. Cuando llega una circunstancia difícil ¿Qué tenemos que decir?: Gracias
Señor porque de esta me vas a levantar.-
Romanos
12:2 nos dice: “…No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la
renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad
de Dios, agradable y perfecta…”. No nos quejemos. Dios te creo para ser
águila. Las águilas cuando vienen las tormentas suben hacia arriba, persevera
en lo que crees. Con Dios vamos a llegar lejos. La clave está en dar gracias en
todo, dar gracias por tu esposa.-
En 2
de Corintios 12:10 leemos: “…Por lo cual, por amor a Cristo me gozo en
las debilidades, en afrentas, en necesidades, en persecuciones, en angustias;
porque cuando soy débil, entonces soy fuerte…”. En vez de quejarme, me
gozo. Cuando soy débil entonces soy fuerte.-
En Santiago
1:2 la Biblia dice: “…Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en diversas
pruebas,…”. Tenemos que vencer la adversidad con la fe. Cualquier
problema te hace más fuerte. Vamos a darle gracias a Dios por la victoria.-
En
Deuteronomio 4:6 dice: “…Guardadlos, pues, y ponedlos por obra;
porque esta es vuestra sabiduría y vuestra inteligencia ante los ojos de los
pueblos, los cuales oirán todos estos estatutos, y dirán: Ciertamente pueblo sabio
y entendido, nación grande es esta…”.-
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